El alcalde de El Buste, Andrés Sanz, fue el primer vecino en alertar al 112 de la propagación de las llamas. Tras una dura jornada cosechando en el campo, Sanz se encontraba durmiendo una siesta en una zona muy próxima al lugar donde se originaron las llamas. Fue su padre quien, muy exaltado, lo despertó. "Cuando me ha avisado mi padre, me he asustado bastante, porque el fuego se encontraba relativamente cerca a nosotros. Y para cuando he salido a la carretera tras llamar al 112, enseguida han llegado los servicios de extinción. Después, he estado con otros vecinos ayudando a apagar las llamas con una simple rama", explicó visiblemente nervioso a este diario.