La licitación, este mes de noviembre, de las últimas obras de la estación de autobuses de Delicias permitirá que esta terminal del complejo intermodal se encuentre acabada y plenamente operativa la próxima primavera, aunque su apertura y puesta en funcionamiento se pospone sin fecha alguna. Desde que a mediados del 2003 finalizasen los trabajos de construcción de la actual estructura, la estación ha permanecido paralizada por la falta de entendimiento entre Gobierno de Aragón y GIF (Gestor de Infraestructuras Ferroviarias) sobre el reparto de los costes económicos.

El consejero de Obras Públicas y Transportes, Javier Velasco, admitió ayer el desbloqueo de las negociaciones y la decisión de ambas administraciones de licitar, cada una por separado, las obras correspondientes que restan. En concreto, la DGA adjudicará el vial norte que uniría la estación con la A-68 --primordial para que los autobuses no utilicen la avenida Navarra-- y una serie de obras complementarias del interior del edificio por un valor de 1,2 millones de euros. Y el GIF, unos acabados cuyo coste ronda los 900.000 euros, aunque otras fuentes estimaron el montante final en 1,6 millones de euros.

Todos estos acabados pendientes se ejecutarán de acuerdo con el borrador diseñado por la firma Urbatrans y Proyectos Civiles & Tecnológicos, a la que el Ejecutivo aragonés adjudicó, el pasado abril, la redacción del mismo. En cuanto a la duración de las obras, se calcula que rondarán los cinco o seis meses.

La DGA ya ha confirmado, no obstante, que no firmará el contrato de compra hasta que la instalación no esté completamente terminada. Más aún cuando existe el compromiso firmado con el GIF, dentro del acuerdo genérico del AVE, de pagar hasta nueve millones de euros (1.500 millones de pesetas) por esta estación de autobuses.

Una vez el Gobierno de Aragón se convierta en propietario único de la instalación, la administración sacará a concurso público la explotación de la gestión. Debido a este largo proceso de desarrollo, el consejero Velasco no se atrevió ayer a avanzar una posible fecha de apertura.

LA COORDINACION Además, la coordinación de las obras que licitarán ambas administraciones va a ser fundamental, ya que la apertura del vial hacia la autopista afectará al suelo ferroviario, por lo que es muy probable que sea necesario el desvío de algunas de las vías. Este acceso unirá la glorieta situada en el extremo oeste de la terminal con la semafórica actual localizada en la A--68 que comunica el barrio de La Almozara.