La estación de esquí de Candanchú es el centro invernal aragonés más visitado por la Familia Real debido a la amistad que mantiene con su director, Eduardo Roldán. Aunque el Príncipe no esquiaba allí desde hacía dos años, el 16 de febrero del 2003 fue el rey Juan Carlos el que se acercó hasta este centro invernal para disfrutar de una jornada de nieve y de sol en la que pudo descender las pistas de Aludes, la Rinconada o el Tobazo. La misma estación fue la elegida por el duque de Palma, Iñaki Urdangarín, en diciembre de 2001 para practicar el esquí, en una visita posterior a la que había realizado con la infanta Cristina.