Los creativos son hombres y mujeres que viven en las ideas hasta el punto que firmar contratos de obra y servicio, tal y como se hacen en la mayoría de negocios, es algo "poco habitual". Quedó patente ayer en una sala de vistas de la Audiencia Provincial de Zaragoza donde una productora, Entrophy Zero, y el prestigioso creativo Antonio José Milares --responsable del anuncio del "calvo de la lotería"-- han acusado a otro productor, José Manuel M. N., de estafarles 64.000 euros por un anuncio.

Señalaron que este hombre pergeñó un plan excusándose en que el cliente final del spot, una juguetera griega, estaba lejos para "quedarse el dinero y siempre contestar con un: 'todavía no me han ingresado'".

Prisión

Por ello, sus abogados --Mercedes Arraiza y Pedro Julvez-- y la Fiscalía solicitan la devolución del dinero y cuatro años de prisión por un delito de estafa.

El acusado, al frente de Ekenge Producciones, se amparó en esa forma de proceder, en que no hay factura alguna, para rebajar exponencialmente el dinero que, al parecer, debe.

Diferenció la producción del anuncio, solicitada por Avión Films, con la postproducción y el rodaje, al igual de las cantidades presupuestadas que dividió en 6.000 euros, que iba a recibir el propio José Manuel M. N. como productor ejecutivo; los 13.000 euros al director artístico y el resto de los 21.000 euros que serían repartidos tanto por su empresa como por la subcontratada, que ahora es la demandante.

Deudas

Tanto el procesado como su abogada defensora, Pilar Roche, recalcaron en que su empresa "también debía cobrar los beneficios de explotación". Hasta tal punto lo reiteraron que hicieron que el magistrado presidente de la Sección Sexta del tribunal provincial les espetara: "obvio que tendría que cobrar algo, sino en 15 días ya hubiesen cerrado, no se vive del aire".

Una visión de negocio muy diferente presentó el administrador de Entrophy, Ignacio Lacosta, quien aseguró que hubo un presupuesto y un acuerdo verbal para realizar el trabajo. "Nosotros cumplimos, él nunca nos pagó por todo lo que trabajamos", lamentó, mientras resaltaba que el encargo se amplió con cartelería publicitaria que tampoco se cobró.

Una desesperación que también mostró el otro personaje de esta historia, Antonio José Milares, que está habituado a repartir ilusión con la Lotería de Navidad. Aseguró que jamás recibió los 13.000 euros de su trabajo y que el enjuiciado tiene otras deudas contraídas con él. "Estaba en un momento personal complicado, se lo dije, pero tampoco le importó", resaltó.

La sorpresa de la vista oral viajó desde Grecia a la sala de vistas zaragozana a través de un empresario, quien erigió a José Manuel M. N. como el "hombre las deudas". Aseveró que le pagó 240.000 euros por una macroproducción en Almería y que luego le llamaba la gente para que le pagara porque querían cobrar. Un tribunal dirá ahora si la historia volvió a repetirse.