El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) de Estrasburgo cerró ayer la causa penal por el accidente del Yak-42, en el el 26 de mayo del 2003 fallecieron en Trebisonda (Turquía) los 62 militares españoles que se dirigían a Zaragoza, de vuelta de Afganistán. Europa ha refrendado la decisión de los tribunales españoles de no abrir juicio oral contra los responsables de las presuntas irregularidades en la contratación del vuelo.

El TEDH, según informó la asociación de víctimas, indamite el recurso interpuesto el año pasado al considerar que no cumple los requisitos de admisibilidad que marcan los artículos 34 y 35 del Convenio Europeo de Derechos Humanos, sin especificar más.

Estos marcan que podrán recurrir al tribunal quienes se consideren víctimas de una violación de los derechos reconocidos en el convenio o sus protocolos, por parte de las autoridades firmantes. Y recoge una serie de causas por las que no se podría apelar a Europa, como que la demanda esté "manifiestamente mal fundada" o sea abusiva. Ninguno de ellos sería aparentemente aplicable al caso.

La asociación de víctimas, presidida por Miguel Ángel Sencianes, calificó la decisión como "un golpe más" pero anunció que luchará por reabrir la causa en España con nuevas pruebas, para iniciar el proceso "desde cero", si es necesario. Sencianes explicó que, entre otras medidas, volverán a pedir a Defensa los 43 contratos de subcontratas aéreas que nunca aparecieron. Confían en que la sociedad, más concienciada, ayude a presionar.