La visera antialudes que construye la Consejería de Obras Públicas en la A-139, cerca de Benasque, ya está casi terminada. Esta obra ha sido muy bien acogida por los habitantes de la zona, dado que permitirá salvar un tramo de carretera donde solía amontonarse la nieve.

La galería antialudes se halla situada en el kilómetro 66,5, en un paraje conocido como Senarta, si bien la denominación elegida para la obra es la de Llauradises, nombre que recibe un barranco que desciende del pico de Estós o Tuca de Dallíu. La estructura estará operativa antes del invierno, cuando se incremente notablemente el tráfico por el valle de Benasque debido al comienzo de la temporada de esquí.

Se trata de una infraestructura muy demandada y que se unirá a las mejoras que la carretera autonómica ha recibido tras las inundaciones del mes de junio del 2013. En aquella ocasión, el desbordamiento del Ésera arrancó tramos de asfalto muy cerca del desvío para ascender a las pistas de esquí de la estación de Cerler.