Apenas han superado los 20 años pero su compromiso con la profesión sanitaria y la sociedad no deja lugar a dudas, y así lo han puesto de manifiesto con una respuesta masiva para vacunarse contra la gripe en el Hospital Clínico de Zaragoza. Sirva de ejemplo para los profesionales que aún no lo han hecho.

Alrededor de trescientos estudiantes de los últimos cursos de Medicina, Enfermería, Fisioterapia y Terapia Ocupacional del campus de Zaragoza y también docentes han respondido al llamamiento que se ha hecho desde el Servicio de Medicina Preventiva para vacunarse, lo que supone el 35 % del total del colectivo a quien iba dirigida la campaña.

Si se tiene en cuenta que el objetivo es llegar al 40 % de las personas que trabajan en centros sanitarios o con población de riesgo y que quien quiera seguir vacunándose lo puede seguir haciendo en días sucesivos en sus respectivos centros de salud, la decisión, a juicio del director general de Salud Pública, Francisco Javier Falo, demuestra que es "un acierto".

Y es que en la pasada campaña 2017-2018 solo se vacunó el 18 % del personal sanitario, una cifra que Patricia Salvador, estudiante de segundo de Enfermería, atribuye a que "igual no se ha animado lo suficiente" a este colectivo y este año en cambio se han dado más facilidades.

Salvador ha sido una de las estudiantes que ha respondido a esta llamada porque va a empezar a hacer prácticas y, ha dicho: "no quiero ni que me contagien ni contagiar".

En opinión del jefe del servicio de Medicina Preventiva del Hospital Clínico, Carlos Aibar, la concienciación para mejorar la cobertura de la vacuna es "una carrera de fondo", por eso también piensa que "aldabonazos" como el de hoy "van bien".

Además, se quería que los estudiantes sirvieran de ejemplo a los profesionales. "Basta que te lo diga alguien que estás formando para que tenga trascendencia", ha reconocido Aibar.

La campaña de hoy no solo ha consistido en vacunarse, sino que se ha aprovechado para dar a los futuros profesionales nociones de cómo lavarse las manos con una cámara de luz ultravioleta que detecta las zonas insuficientemente limpias tras la utilización de una solución hidroalcohólica y se les ha facilitado un decálogo de recomendaciones para la prevención de la gripe y otras enfermedades transmisibles.

Y de paso estudiantes de cuarto, supervisados por profesionales del Hospital Clínico, han aprovechado para hacer prácticas en turnos de dos horas, como Carlota Estopañán, Irene Pérez y Andrea Fernández, quienes hoy compartían una de las mesas de vacunación.

Estopañán se ha mostrado muy satisfecha con el servicio que se estaba dando y con el ejemplo que desde el colectivo estudiantil se está dando, al tiempo que ha aprovechado para recordar que la febrícula que a algunas personas le puede dar la vacuna no significa que se haya contraído la gripe y que "no hay que tener miedo", sobre todo los colectivos más vulnerables.

La planta sótano -1 del Hospital Clínico de Zaragoza ha sido un trasiego de estudiantes y profesionales sanitarios durante toda la mañana, que no ha querido perderse la consejera de Sanidad, Pilar Ventura, quien ha transmitido a los medios de comunicación, de acuerdo con las informaciones que ha recibido, el "éxito" de esta iniciativa que está sirviendo de "efecto llamada".

Según fuentes del Gobierno de Aragón, una semana después del inicio de la campaña de vacunación contra la gripe ya se han dispensado en Aragón más de 47.000 dosis.

Por grupos de edad se han vacunado 669 niños de 0 a 14 años, 9.397 personas de 15 a 64 años y 37.365 ciudadanos a partir de 65 años.

La campaña de vacunación frente a la gripe estará en marcha hasta el 14 de diciembre, aunque la vacuna, de la que se han repartido 260.000 dosis en los centros de salud, estará disponible hasta finales de febrero para cualquier persona incluida en los grupos para los que está recomendada