Los atentados cometidos por diferentes grupos terroristas han dejado en Aragón 156 heridos entre 1979 y 2006, según el libro Heridos y olvidados. Los supervivientes del terrorismo en España escrito por María Jiménez Ramos y Javier Marrodán Ciordia, profesores en la Facultad de Comunicación de la Universidad de Navarra, y editado por La Esfera de los Libros.

ETA es mayoritariamente el grupo que ha causado más víctimas, con un total de 141. Además de los cinco provocados por los GRAPO y diez atribuidos a otras organizaciones. La provincia de Zaragoza aglutina el mayor número, con 155, y en Huesca solo se reconoce un herido por atentado. Teruel es una de las doce provincias españolas que no ha sido escenario de atentados terroristas con heridos reconocidos. En cuanto a la capital aragonesa suma al 98% de los lesionados por terrorismo en la Comunidad, a los que hay unir dos en el municipio de Luna.

Promovida por el Centro Memorial de Víctimas del Terrorismo, es la primera investigación que cuantifica los lesionados en atentados reconocidos por el Ministerio del Interior, que ha concedido la condición de herido a 4.808 personas en los últimos 50 años. Una cifra que se elevará a los 5.000 cuando se resuelvan los expedientes de los heridos en los atentados yihadistas de Cataluña en el 2017.

Zaragoza es la séptima provincia española con un número más elevado de heridos y la capital aragonesa la quinta ciudad de España. La mayoría proceden de dos atentados perpetrados en 1987 con el método del coche bomba. El ataque contra un autobús de la Academia General Militar y el atentado contra la casa cuartel de la Guardia Civil. En Luna, los dos heridos fueron consecuencia de la explosión de una mochila con dos kilos de amonal en el cuartel de la Guardia Civil en diciembre de l2004. En Jaca, un sargento destinado en la Escuela Militar de Alta Montaña falleció al explotarle una carta-bomba de ETA en 1989.