El área de Urbanismo del Ayuntamiento de Zaragoza realizará un estudio para determinar cuántos hoteles situados en el Casco Histórico de la ciudad podrían reconvertirse y dedicar parte de sus instalaciones a viviendas. Este análisis se realizará a partir de una petición realizada por el hotel Meliá, en la avenida César Augusto, para la modificación del plan general de ordenación urbana, de modo que pueda dedicar parte de su edificio a otros usos residenciales, como apartamentos o incluso una residencia.

Aunque la Gerencia de Urbanismo iba a tratarse ayer este punto, finalmente se retiró al reclamar los grupos municipales que se realice un estudio sobre cuáles serían las implicaciones de la modificación de ese plan general, dado que abriría la puerta a que otros hoteles también situados en el Casco Histórico lo pidiesen. Urbanismo aceptó la realización de este documento, que se extenderá al resto de la ciudad (en otros distritos, en realidad, esto ya está permitido).

Tal como se puso ayer de manifiesto, el Meliá tiene ya incluso licencia, concedida hace varios años para convertirse en su totalidad en un bloque de viviendas. Pero la norma, que trata de proteger de forma especial el Casco Histórico, impide la división horizontal del edificio. Según detallan los responsables del establecimiento, les resultaría rentable el proyecto de dedicar las dos plantas superiores a viviendas y dejar el resto como hotel.

Para ello se ha pedido la modificación del plan general, aunque finalmente el punto se retiró tras la petición de IU, a la que se sumaron el resto de los grupos, para que se realice un estudio que cuantifique cuántos hoteles en el Casco Histórico podrían verse afectados. Todo apunta a que se aprobará. De hecho, el informe, que firma el arquitecto jefe del servicio técnico de Planeamiento y Rehabilitación del consistorio, asegura que "no se ve inconveniente" para que se admita la petición.