Las actividades creativas han aumentado en el medio rural y además sirven como motor de desarrollo para los municipios en las que se llevan a cabo. Así lo demuestra un estudio llevado a cabo por un equipo interdisciplinar de profesores de la Universidad de Zaragoza.

«Aragón representa un caso paradigmático por la gran extensión de área rural que posee. Muestra una gran concentración de actividades creativas y por ello hemos seleccionado diversos municipios de la comunidad», destacó Ana Isabel Escalona, miembro del grupo de estudios de desarrollo territorial del instituto de Investigación en Ciencias Ambientales (IUCA) de la Universidad de Zaragoza.

115 clústeres creativos

La investigación se ha llevado a cabo entre 7.367 municipios españoles de menos de 50.000 habitantes que se encuentran situados fuera de las grandes áreas urbanas. De ellos, se han identificado 541 municipios españoles y 155 clústeres espaciales de actividades con un alto contenido creativo relacionadas con las artes y el patrimonio, comunicación y medios, artesanía, consultoría, ingeniería o arquitectura. En Aragón destacan como clústeres creativos Alcañiz, Calatayud, Barbastro o Teruel, localidades todas ellas que coinciden con cabeceras de comarcas.

La investigación pretende mostrar cómo estas actividades creativas pueden favorecer el crecimiento inteligente, sostenible e inclusivo a todas las escalas. Gracias al estudio se ha conseguido encontrar los municipios con actividades creativas (ya que hasta ahora solo se había llevado a cabo en las ciudades) y ponerlos en el mapa así como clasificar los municipios según su intensidad (de menor a mayor relevancia, que es la que representan los clústeres), «Queríamos captar qué significaba para estos lugares ser clústeres creativos y cómo influía en su capital y desarrollo humano. Así se pueden buscar oportunidades viables en las áreas rurales ya que se trata de actividades e iniciativas que merecen tener apoyo», apuntó Escalona.

Comparando los datos a través de los resultados, se revela cómo los municipios que actúan de clústeres creativos tienen mejor comportamiento y más dinámismo que los que no lo son. De este modo, se deduce que tener actividades creativas representa una ventaja para el desarrollo.

Para realizar la selección de los municipios tuvieron en cuenta cuántas empresas operan en ellos y cuánta gente trabaja. En el caso de Teruel destacan como creaciones funcionales las empresas de videojuegos.