La Comisión Europea se sumó ayer al rechazo judical que ha provocado la paralización del proyecto de embalse de Biscarrués. En la respuesta a una pregunta presentada en mayo por el eurodiputado de Primavera Europea en el Parlamento Europeo, Florent Marcellesi, destacó su respeto a la sentencia reciente de la Audiencia Nacional en la que se anuló el expediente de información del proyecto y del anteproyecto, así como la declaración de impacto ambiental del pantano. Además, la cámara recordó que no se está llevando a cabo «ninguna investigación» en lo que respecta al cumplimiento de las obligaciones básicas de la directiva de evaluación del impacto ambiental, ya que la obra está condicionada por esa orden judicial.

La respuesta que han recibido CHA y Equo, ambas integradas en la coalición del eurodiputado, debería servir para que las autoridades españolas «abandonen definitivamente» el plan al considerar que ha quedado demostrado «que es contraria a los principios de la Directiva Marco de Aguas», según dijeron.

riegos / La formación emitió ayer un comunicado en el que recordó que durante los últimos 35 años «el proyecto de embalse de Biscarrués viene condicionando negativamente el futuro de los municipios de La Galliguera» y culpabilizaron a la presa de ser «la consecuencia directa en la pérdida de inversiones en infraestructuras y servicios», así como de la falta de materialización «de algunas iniciativas privadas por la incertidumbre» que crea la posibilidad de anegar el valle.

La Sala de lo Contencioso de la Audiencia Nacional declaró nulo en julio el anteproyecto de construcción del pantano en dos sentencias en las que dio la razón a tres ayuntamientos (Biscarrués, Murillo de Gállego y Santolaria) y varias oenegés (Sociedad Española de Ornitología, la Confederación Ecologistas en Acción-CODA, Greenpeace, la Asociación de Amigos de la Tierra y WWF/Adena España) por un litigio que dura ya tres décadas.

Los fundamentos del tribunal se basan en que la declaración de impacto ambiental del embalse de Biscarrués «no contiene todos los estudios y evaluaciones necesarias» antes de decidir acerca de la evaluación del deterioro de aguas afectadas por este proyecto, que tenía como objetivo principal dotar de más agua a Riegos del Altoaragón en el sur de la provincia de Huesca. Un embalse que ha sufrido a lo largo de su tramitación más de una modificación, ante la presión de los vecinos de la zona, que veían afectada su actividad turística, principal motor de desarrollo, y porque se podían ver afectados los tres núcleos demandantes.

El rechazo a este proyecto se suma a los recursos que ha sufrido la licitación de la presa de Almudévar, también reclamado por los regantes.