A. B. P., exesposa del agente del Cuerpo Nacional de Policía J. M. M. F. M., pide para este seis años y dos meses de prisión por un delito de maltrato habitual, dos de lesiones y tres de amenazas. El imputado ocupará el banquillo del Juzgado de lo Penal número 9 de Zaragoza el próximo 19 de marzo, cinco semanas antes de que un tribunal popular lo juzgue en la Audiencia de Valladolid por la muerte de Rufino Arnanz, el marido de su amante, que falleció tras recibir varias cuchilladas el 21 de noviembre del 2011.

La mujer, en cuyo nombre ejerce la acusación particular el abogado Jorge Toquero, pide también que el agente no puede llevar armas en seis años y que no pueda acercarse a menos de medio kilómetro de ella en 18, periodo durante el que reclama que tenga que llevar una pulsera de localización,.

La Fiscalía solicita 33 meses de prisión y doce años de alejamiento para J. M. M. F. M., a quien imputa tres delitos de maltrato y uno de amenazas.

La defensa, a cargo de la penalista Olga Oseira Abril, pide la absolución del acusado al entender que no existen pruebas para incriminarle.

La mujer denunció las presuntas agresiones en agosto del 2012, tras quedar J. M. M. F. M. en libertad provisional por el asunto de Valladolid.

Las acusaciones sostienen que el policía zarandeó y propinó empujones a su esposa --esta padeció un trastorno adaptativo mixto ansioso depresivo entre octubre del 2011 y enero del 2012-- en tres ocasiones entre agosto del 2009 y septiembre del 2011, siempre después de que le sorprendiera hablando por teléfono o chateando con otra mujer. Un hijo de la pareja le pidió a su padre que se fuera de casa tras uno de esos episodios.