Las Fallas de Valencia aterrizan este año en Zaragoza. ¿Quién le iba a decir a los zaragozanos hace años que el Día de Aragón habría cerca de 3.000 valencianos a orillas del Ebro celebrando su fiesta más tradicional? Desde el próximo día 21 hasta el 23, la arboleda de Macanaz acogerá una fiesta que llega con todos sus ingredientes: una falla de nueve metros de altura, mascletá, la nit del foc (fuegos artificiales), pasacalles, ofrenda de flores, mucha música... Una iniciativa que busca enseñar todos los secretos que le han otorgado la distinción de ser Patrimonio de la Humanidad.

La propuesta llega de la mano de una asociación sin ánimo de lucro, Fallers pel mon (Falleros por el Mundo) que en el 2013 decidió difundirlas por toda España. Ha pasado por Ávila (2013), Granada (2014), Toledo (2015) y Córdoba, el año pasado, «con gran éxito de público». Así lo explicó ayer a este diario su presidente, José Amores, quien aseguró que este año van a movilizar a unos 1.200 falleros, a los que se sumarán «otros 1.600 o 1.800 valencianos» que, por cercanía con Zaragoza, se desplazarán por sus propios medios. «Siempre pensamos en ciudades con encanto y esta vez, además, nos unen muchos vínculos culturales e históricos. Somos primos hermanos», añadió. Han copado la mayoría de hoteles del centro y sus alrededores, y dejarán un buen retorno a la ciudad, por medir el impacto económico de esta cita inédita en la capital.

Y que nadie vea con suspicacia que coincida con San Jorge, el Día de Aragón, porque ha sido «por casualidad». «Siempre lo celebramos el segundo domingo de Pascua porque en Valencia el lunes es festivo (San Vicente) y nos permite regresar a todos. Y este año ha caído así», explicó.

Quienes conozcan las Fallas no echarán en falta ningún detalle. Comenzará el día 21 con la tradicional plantá, el montaje del monumento en cartón piedra que da nombre a la fiesta. El artista Álex Oliver da los últimos retoques a una falla de 9 metros de altura y un diámetro de más de 8, dedicado a la gastronomía y los programas televisivos. También habrá otra infantil, más pequeña, centrada en un carrusel, y la clásica astoreta, que explica cómo nacieron las fallas, a base de utensilios domésticos que se arrojaban al fuego en la popular Cremá, que en Zaragoza será el día 23, a medianoche, como es costumbre. Solo se salva del fuego el ninot indultado que se le regalará al ayuntamiento.

También habrá ofrenda de flores, en la plaza del Pilar y a la Virgen de los Desamparados. A las 18.00 horas del día 22, con 500 falleras. Aunque la asociación invita «a quien lo desee a sumarse, ataviado con traje tradicional, el que tenga». Acabará con una misa en el Altar Mayor de la basílica del Pilar, a la que seguirá un pasacalles por los puentes de Piedra y de Santiago. Antes de asistir, a las doce de la noche, a la tradicional nit del foc, el espectáculo de fuegos artificiales más ambicioso de las Fallas. Para el domingo, el plato fuerte será la mascletá, en el parque Macanaz, siempre a las 14.00 horas, como dicta la tradición, y la Cremá. Y que el fuego funda a las dos ciudades.