Un joven de 21 años falleció ayer en una caída accidental al patio de luces de su vivienda, en la calle San Pablo de Zaragoza. Según la investigación policial, estaba bajando por un canalón para coger un objeto que se había caído al lugar, al parecer inaccesible, y se precipitó desde el segundo piso, donde residía. Pese a la relativa poca altura, al caer se golpeó en la cabeza y falleció como consecuencia del impacto.

Aunque la Policía tenía ayer bastante clara la mecánica del accidente, un portavoz de la familia afirmaba a las puertas de la vivienda que no había nada claro. "No sabemos qué ha pasado", insistía. La familia, de origen latinoamericano, había recibido un buen número de visitas para dar muestras de duelo y declinó hacer más declaraciones, con todos visiblemente afectados.

En la casa, en el número 96 de la citada calle, convivían al parecer la víctima, su madre y otro hermano, y no era la primera vez que los vecinos veían a cualquiera de los dos jóvenes usar ese método para bajar al patio a por algún objeto caído.

Ayer, poco después del mediodía, uno de ellos se asomó a la ventana y vio al joven inmóvil en el suelo. Al lugar llegaron primero los bomberos, que tuvieron que acceder al patio de luces precisamente por la ventana de la vecina que había dado el aviso, mediante escaleras.

Los sanitarios certificaron que el joven estaba muerto, por lo que se dio aviso a la comisión judicial y a la Hermandad de la Sangre de Cristo para proceder al levantamiento del cadáver. Dado lo poco accesible del lugar, los bomberos tuvieron que ayudar a los encargados a llegar hasta el cuerpo e izarlo.

Este fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Aragón y, en espera de que se le practique la autopsia, la causa más probable de la muerte es un golpe en la cabeza al caer, tras resbalarse, del canalón al que se había encaramado para bajar al patio, según fuentes consultadas.

PRECEDENTES

Aparte de accidentes laborales y de tráfico, y dejando aparte grandes tragedias como las de la residencia Santa Fe o la Pirotecnia Zaragozana, la del joven ha sido una de las pocas muertes por accidente que han trascendido este año en Aragón. El pasado mes de septiembre se producía la última, la de otro vecino de Zaragoza, de 70 años, que cayó al río Huerva desde el puente de los Cantautores del parque José Antonio Labordeta, al resbalar desde la barandilla en la que estaba apoyado.

A comienzos de año también perdió la vida un cazador en un paraje de Caldearenas, en Huesca. La víctima, un vecino de Navarra, falleció por un disparo accidental de otro de los participantes en la batida.