Alrededor de 600 alumnos que estudiarán este curso alguna de las titulaciones que se imparten en la Facultad de Educación deberán quedarse en el viejo edificio y aplazar su traslado al nuevo hasta el segundo cuatrimestre. La falta de liquidez para dotar al centro del equipamiento necesario aboca al rectorado a esperar hasta completar la puesta a punto de la facultad, que abrió sus puertas en febrero tras un aplazamiento de varios meses en las obras por falta de pago.
El rectorado había solicitado a la DGA una partida de 900.000 euros para asegurar un comienzo de curso con el centro totalmente equipado, pero, finalmente, la Administración, que no contempló en los presupuestos del 2014 ninguna dotación para infraestructuras universitarias, ha dispuesto, finalmente, algo más de 90.000 a través de un concurso que, además, provocará que el material no llegue hasta el segundo cuatrimestre. "Además de las aulas, no se va a poder cubrir suficientemente la biblioteca, el salón de actos o los depachos de los profesores, ya que no todos ellos disponen de mesa, pero nos apañaremos como podamos", indicó el decano, Enrique García.
Por eso, el curso comenzará, el próximo día 15, "no en las mejores condiciones", según el decanato que, en todo caso, valora la situación actual en comparación con el inicio de curso del año pasado. "Venimos de una situación indigna, pero, aunque seguimos en precario, vamos a tener espacio para desarrollar actividades y eso es un auténtico logro para nosotros", subrayó García, que admitió que la facultad sigue "en precario" porque "parte de los alumnos continúa en el viejo edificio".
TRASLADO IMPOSIBLE
Además de los laboratorios, el mobiliario que permanecerá en el antiguo edificio --situado en la calle San Juan Bosco-- es de bancada, es decir, mesas agarradas al suelo que no es posible trasladar el nuevo centro y que acogerá a los alumnos que tendrán que aplazar su traslado. Otros 1.400, sin embargo, ya disfrutarán este curso de las comodidades de la nueva facultad.
La nueva Facultad de Educación tiene una superficie de 17.821 metros cuadrados y, entre otras instalaciones, alberga 26 aulas y 9 seminarios, además de algunos servicios generales del campus que ocupan 2.500 metros cuadrados en el sótano. La construcción se inició en junio del 2010 y tuvo que suspenderse por falta de financiación entre el 11 de julio del 2012 y el 11 de marzo del 2013. La obra salió a concurso por 20.214.000 euros y se adjudicó a UTE Sacyr-Ideconsa por 13.165.000.
