¿Cómo gestionar las últimas voluntades de un anciano? ¿Qué hacer cuándo una decisión de la persona mayor no coincide con la de sus familiares? Todas estas cuestiones se abordarán el próximo jueves en la primera Jornada sobre Bioética que se celebrará en la Residencia Ibercaja-Rey Ardid (Juslibol) y que está dirigida a todos aquellos especialistas en el cuidado de mayores como enfermeras, auxiliares o técnicos.

"Se generan situaciones muy complicadas y queremos guiar un poco acerca de cómo afrontarlas", asegura María Jesús Germán, abogada de la Fundación Rey Ardid. La bioética es la rama de la ética que se dedica a proveer los principios para la conducta correcta del humano respecto a la vida. "Hay que manejar contextos que nacen por las voluntades anticipadas, por temas acerca de cómo poder redactar un testamento en vida o de traslados de residencia, por ejemplo. Todo esto varía en función de si la persona puede o no tomar decisiones. Si está capacitada, muchas veces lo que ella opina no es lo mismo que consideran sus familiares", cuenta Germán.

Desde el ámbito jurídico, los trabajadores necesitan saber si realmente las personas mayores tienen o no capacidad para decidir por ellas mismas. "Es fundamental, porque toda persona tiene derecho a tomar una decisión por sí misma y no por terceros", apuntó la abogada.

En ocasiones, se trata de pacientes en situación terminal. "Se dan problemas, pero nuestra misión es dialogar y hablar para optar por lo más adecuado. Quizás el abuelo quiera morir tranquilo sin la necesidad de seguir tomando más medicación cuando sabe que va a morir y no quiere prolongar más la situación, mientras que los hijos se agarran a todo y, evidentemente, no comparten ideas porque tienen criterios dispares", explica Germán, quien añade que "en alguna ocasión" se puede llegar a "perder los nervios" por la situación. "Son momentos muy dolorosos y lo entendemos", dice.

Desde la Fundación Rey Ardid, donde ya cuentan con un comité de ética formado por especialistas del área de mayores del organismo, tienen el objetivo de que esta jornada sirva para "informar bien" y "aunar la experiencia" de los expertos en esta materia para sentar las bases de lo que debería ser una norma general que aclare cómo tomar las decisiones al respecto. "Cualquier interesado puede venir, sea profesional sanitario o no. Queremos formar a la gente a manejar estas situaciones y empezar a trabajar en un campo de deliberación para que nadie se sienta solo. todos somos un equipo y nos gustaría tener un espacio en el que podamos debatir", explicó Germán.