Vestidos como obreros y auténticos albañiles, con señales de obra e incluso con ladrillos, varias familias y alumnos del colegio Rosales del Canal, en Zaragoza, protestaron ayer a las puertas del centro por el retraso en la construcción del edificio de Secundaria.

El colegio, decretado como integrado (Primaria y Secundaria), no dispondrá para el próximo curso de la instalación «prometida» por Educación, según las familias. «Se han reído de todos nosotros», señalaron desde la Asociación de Madres y Padres del centro. «Seguimos con el mismo número de aulas y espacios comunes a pesar de seguir incrementando el número de alumnos el curso 2017-2018», añadieron. Por el momento, la DGA no les ha confirmado donde se ubicarán los alumnos que este año cursan 6º de Primaria y el próximo tienen que iniciar el curso de 1º de ESO.

«Los únicos espacios de los que disponemos son la sala de psicomotricidad, el gimnasio, la biblioteca... Nos vemos con que nuestros hijos van a tener que dar clases en zonas que están destinadas para otra cosa. Así parchearán la situación», apuntaba un padre afectado.

«La noticia del retraso nos ha caído como un jarro de agua fría», declararon las familias. «Cuando parecía que por fin iban a ampliar el colegio, dotándolo del espacio necesario, nos encontramos que nos han vuelto a mentir y que solo reconvertirán aulas, que no se ganará ni un metro cuadrado nuevo», añadieron. En su caso no se prevé la instalación de barracones, algo que Educación ya ha confirmado para el colegio Río Sena, en Miralbueno, donde también se ha confirmado un retraso en de la creación del edificio de Secundaria. Allí carecen de aulas libres.

La de ayer fue la primera de las «muchas» protestas y movilizaciones que prevén desde el AMPA de Rosales del Canal, en el sur de Zaragoza. «No nos vamos a quedar parados y vamos a luchar por lo que nos corresponde», añadieron.