Las nuevas tecnologías siempre suman y pueden incluso fomentar el control de la medicación de los pacientes. ¿Cómo? La clave está en una simple tarjeta física que registra información sobre los fármacos que toma el usuario y a través de la cual se mejora el seguimiento de los usuarios y facilita la colaboración entre boticas para el control de la adherencia a los tratamientos o la vigilancia ante posibles duplicidades. Esto es lo que hace la iniciativa Mi Farmacia Asistencial una propuesta del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos que se inició de manera experimental y pionera en Teruel y que ahora se va a extender a todo Aragón.

En la provincia turolense “ha sido todo un éxito”, según ha reconocido este lunes Jesús Aguilar, presidente del colegio nacional. “Actualmente el 58% de las farmacias de Teruel están participando en el proyecto, con un total de 544 pacientes”, ha dicho. Allí, han sido cuatro meses de prueba "y el objetivo es extenderse a toda España", ha asegurado Aguilar.

Se trata de una herramienta digital que conecta a todas las boticas adheridas al proyecto (un total de 180 en toda la comunidad). Es decir, es como tener la farmacia en la red. Los usuarios que dispongan de la tarjeta podrá conocer toda su medicación, "estén donde estén", en cualquier establecimiento. Está disponible para cualquier ciudadano, aunque se trata de un recurso con más valor para pacientes crónicos o polimedicados que toman diferentes fármacos y que, en alguna ocasión, pueden tener confusión sobre qué pastilla tomar. Ahí es donde jugará un papel importante el farmacéutico de Mi Farmacia Asistencial, porque este profesional podrá mejorar el uso y el consumo, con todas las garantías de protección de datos y confidencialidad.

"Cada una de nuestras farmacias están trabajando de manera individual, cada uno sus trabajos de atención y prestación, pero queremos llevarlo a una red y destacar todos los resultados de las farmacias. Este trabajo de conexión de red es voluntario y es una respuesta profesional a los pacientes y a la transformación digital en la que estamos inmersos", ha añadido Aguilar.

Indicación farmacéutica

El presidente colegial nacional ha destacado la función social de las farmacias, por las que cada día pasan más de 2 millones de clientes en el país. "Lo que vamos a conseguir es que los pacientes puedan saber su medicación en cualquier farmacia de Huesca, Zaragoza o Teruel con la tarjeta", ha añadido.

Además, se incorpora el servicio de Indicación Farmacéutica, que supone que cuando el paciente llegue a la farmacia para pedir un medicamento sin receta, para una patología leve, el profesional sabrá su historial farmacológico y podrá indicar el fármaco adecuado. "Este servicio aumenta la seguridad en el uso de medicamentos sin prescripción y, además, disminuirá la presión asistencial en las consultas médicas de Atención Primaria y en urgencias", ha señalado Aguilar.

Esta plataforma puede coexistir con el sistema público de receta electrónica. "Aquí hablamos más de la parte privada, del paciente que acude con recetas de una mutua o una clínica privada.