--En estos 22 años que lleva siempre hizo escultura?

--Bueno, acabé Bellas Artes y comencé con los pinceles, pero de inmediato descubrí que lo mío era la escultura.

--¿Y directamente dio con esta fórmula?

--No, realmente uno va probando hasta encontrar su sitio. Empecé con obras más abstractas. Como todo es fruto de una poderosa vocación no tienes la necesidad de buscar fórmulas comerciales sino algo que te emocione.

--Es una obra la suya muy conceptual, muy descriptiva.

--Es así; muy intuitiva también.Y uno se deja influir por los tiempos en que vive, es inevitable. Estuve en Corea y volví fascinado; de inmediato eso se reflejó en unas casas de madera sobre el agua.

--Hay mucho trabajo de taller en su creación.

--Sin duda. Hago mías las palabras de Miró cuando decía que iba todos los días al taller como el que va al huerto, a cultivar. Y allí siempre puede suceder de todo. Hay que ir al taller a resolver, no con las ideas resueltas.

--Eso siempre muestra un espíritu vocacional.

--Claro, si fuese comercial te esperarías en casa hasta que te llegase trabajo y entonces irías a realizarlo. No, hay que trabajar todos los días. Yo tengo obras que sé que me acompañarán toda mi vida,porque son difíciles de vender, porque las hice prácticamente para mí.

--¿El futuro hacia donde camina?

-Creo que se tendrá que involucrar más con las nuevas tecnologías. Las galerías deben ampliar su mirada, no ser algo estático. La presencia de Internet ha revolucionado todo, de manera que el artista obtiene de inmediato respuestas a su obra de todo el mundo. Eso te hace trabajar de otra manera.

--¿Y la crisis? ¿Hay crisis?

--Mucha. Se ha notado de manera incontestable la subida del IVA. Ha afectado mucho al mundo del arte. En todo caso, a mí solo me da miedo quedarme sin ideas.

--¿Siguen vivos los buenos coleccionistas?

--Sí, por fortuna, sí. Pero los medianos no pueden. Las instituciones se han retirado de la compra, lo mismo que las empresas, que antes adquirían mucho arte. Se da un caso curioso y es que algunas empresas no quieren comprar para que no les acusen de despilfarrar, imagina.

--¿Entonces?

--Los artistas tendremos que movernos más, viajar, ir a ferias. Ahora precisamente tengo una exposición en Alemania.