POR

ADRIANA OLIVEROS

Olé, olé y olé. Cómo estuvo ayer el Campo del Toro de Zaragoza, en el Día de los Toreros y de su San Pedro Regalado. Arte, trapío y lo mejor de lo mejor, desde Raúl Gracia El Tato , que además de buen torero es más majo que los euros, hasta José Ortega Cano, sin Jurado y tardano pero armado de simpatía y solicitud con la prensa. Acudió él para ser homenajeado junto con el doctor Valcarreres, que lleva 25 años de buenas faenas en la plaza. Y con el matador Raúl Aranda y el banderillero Luis Sánchez Gavín (El catedrático le llaman). Empezaron rindiendo honores al busto de Nicanor Villalta, junto a otros profesionales del toro, como Roberto Bermejo, Carlos Casanovas, Diego Luna, Rafael Sauco, Diego Ochoa, Alberto Aguilera y Alberto Alvarez, ganaderos, como José Marcuello y Jesús Marcén, el empresario Ignacio Zorita, presidentes de la plaza como Francisco Bentué y García Terrer... Cuánto invitado. Cuánto corrillo. Y cuánta verónica hizo la lupa para fichar a tanto personal. Eduardo Couto y Pilar Zalaya, de la Federación de Peñas, Luis Mata, de la de Torrero, Dorita Esparcia, de La Madroñera, Celia Serrano, que es madre de Serranito , y hasta la alcaldesa de La Muela, Victoria Pinilla, el director de Radio Ebro , Salvador Asensio... Y Jacinto Ramos y Daniel Castán, en la cocina, lidiando con el toro en la cazuela, mientras los organizadores Lourdes Gazulla y Rafael Conde ubicaban a los rezagados. Glosó él los premios. Y Ortega se emocionó con una Zaragoza que le dio la alternativa y casi le quita la vida (si no hubiera sido por Valcarreres). Como siempre hubo recaudación para el Comedor del Carmen (664 euros). Y estocada con café, copa y puro. Por ustedes.