El Ayuntamiento de Biescas (Huesca) ha dado por finalizadas las obras de rehabilitación del antiguo molino hidráulico de cereal que se conserva en el núcleo de Anielle, un pueblo deshabitado cuyo nombre popularizó Julio Llamazares en su novela "La lluvia amarilla".

Según informa el consistorio, el molino es un edificio del siglo XVIII, de extrema simplicidad en su configuración y que conserva en perfecto estado de conservación su maquinaria de funcionamiento.

La actuación principal ha sido la sustitución de la cubierta, rehabilitada ya en los años ochenta del pasado siglo y con numerosas goteras que han obligado a reponer la estructura de madera y a protegerla con una lámina aislante sobre la que se asienta el tejado tradicional de losas.

El alcalde de Biescas, Luis Estaún, ha explicado que era "necesario" recuperar el valor intrínseco del molino como muestra del patrimonio preindustrial y de la arquitectura popular pirenaica.

El núcleo de Ainielle es uno de los pueblos abandonados más visitados del Pirineo tras convertirse en el escenario de la novela de Llamazares, en la que uno de sus capítulos más dramáticos transcurre en el entorno del molino.