La empresa por la que la UDEF (Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal) del Cuerpo Nacional de Policía vincula al exvicepresidente del Gobierno y exsecretario general del PP Francisco Álvarez Cascos con la trama Gürtel operó en las provincias de Huesca y Teruel en la época en la que se centra la investigación de la presunta trama corrupta, coordinada por el magistrado de la Audiencia Nacional Pablo Ruz. Un reciente informe de la UDEF señala que la red Gürtel utilizó una empresa instrumental llamada Spinaker 2000 para integrarse en otras que obtenían elevados beneficios con las adjudicaciones públicas que les conseguía la trama gracias a sus conexiones con distintos gobiernos del PP. Los beneficios que obtenía eran repartidos entre seis personas, una de las cuales, según la Policía, era Álvarez Cascos. Spinaker constituyó junto con el grupo leridano Ros Roca una sociedad llamada Enercorr XXI que, a principios de la pasada década, impulsó una planta de tratamiento de purines equipada con un sistema de cogeneración en Belver de Cinca.