Una mujer se enfrentará a partir de mañana en la Audiencia de Huesca a una petición fiscal de 20 años de prisión por el presunto asesinato, a cuchilladas, de su marido en una finca de campo localizada en el municipio oscense de Zaidín.

Los hechos, que serán enjuiciados por un jurado popular, ocurrieron a primeras horas de la madrugada del 4 de julio de 2012, cuando el marido estaba acostado en la cama de la casa de campo y sin esperar ser víctima de una agresión por sorpresa.

Según relata el ministerio fiscal en su escrito de calificación provisional de los hechos, la mujer, Rosa María T.S., se abalanzó repentinamente sobre su marido y le clavó un cuchillo de cocina, de 14 centímetros de longitud, en numerosas ocasiones y en diversas partes del cuerpo.

El hombre, quien sufrió heridas en cara, torso, región dorsal, brazo y escroto en el ataque, consiguió sobrevivir pero falleció un año después debido a la gravedad de las heridas infligidas por su mujer, según el informe de los peritos forenses.

El ministerio público señala que aunque la agresión se produjo entre las 00.00 y 02.00 horas de la madrugada, la mujer no llamó a los servicios de urgencia hasta las 07.00 horas.

La propia víctima relató al personal médico que le atendió que su mujer le acuchilló en repetidas ocasiones.

Además, el conductor de la ambulancia que realizó el traslado del herido a la UCI del Hospital Arnau Vilanova de Lérida declaró que la mujer le reconoció ser la autora de las cuchilladas.

Durante las semanas y meses siguientes a la agresión, el herido permaneció ingresado en un centro sociosanitario de larga estancia para enfermos crónicos debido a la gravedad de las heridas sufridas en el abdomen.

Según los peritos, el 28 de junio de 2013 y a consecuencia de las heridas sufridas, el paciente volvió a ingresar en el servicio de urgencias del hospital leridano afectado por un shock séptico por obstrucción abdominal que le provocó una parada cardiorrespiratoria de la que no se recuperó.

El fiscal tipifica los hechos como un presunto delito de asesinato con ensañamiento y solicita para la acusada una condena de 20 años de prisión, así como el pago de indemnizaciones de 120.000 euros para cada uno de los dos hijos del matrimonio.

Por su parte, la acusación particular, para quien la mujer quiso provocar una "muerte lenta" a la víctima para que sufriera desangrándose, solicita 37 años de cárcel y la prohibición de acercarse y comunicarse con los dos hijos del matrimonio, a quienes representa, por un tiempo de 10 años.

Los hijos, a quienes según consta en sus declaraciones la procesada impidió entrar a gritos en la finca cuando la víctima se desangraba, declararán por videoconferencia.