Fiscalía concluyó ayer el juicio a la banda de narcotraficantes acusados de traer grandes cantidades de cocaína a Zaragoza ocultas en coches con caletas (escondrijos) rebajando las peticiones de condena totales en unos 162 años, desde los 250 iniciales a los casi 88 en que quedaron sus conclusiones definitivas.

A la luz de lo que ha visto probado a lo largo del juicio, y teniendo en cuenta les escasas confesiones y la drogadicción acreditada de alguno de ellos, el fiscal modificó sus conclusiones dividiendo a los 23 detenidos en dos grupos independientes, uno de 8 componentes y otro de 15 (el que sería, propiamente, el clan de los Insausti), con sus correspondientes penas y multas que superarían ampliamente los 300.000 euros. En tres de los casos, al ser inmigrantes irregulares, solicitó sustituir la prisión por expulsión.

Pese a la rebaja de las pretensiones iniciales, las penas siguen oscilando entre los dos y medio y los ocho años, y salvo los tres que admitieron los hechos, los letrados mantuvieron la absolución. Algunos, como José Cabrejas y José Luis Melguizo, reiteraron que la causa debería estar anulada de raíz por errores procesales y escuchas sin supervisión.