El menor acusado de matar junto a su hermano al senegalés Lamine Gueye en su domicilio de la calle Mompeón Motos, en el barrio zaragozano de Delicias, se enfrenta a una condena de siete años de internamiento en un reformatorio por el crimen. La Fiscalía mantuvo ayer, tras la tercera y última jornada del juicio, la solicitud de pena para el joven como autor material.

Él reconoció en el juicio que sí acudió, con su hermano, en coche desde Calatayud hasta la casa del senegalés, el pasado 11 de mayo. Reconoció ante la Fiscalía que subió a la casa, con su hermano mayor, B. M. G., pero no que participase en el crimen. De hecho, apuntó que el fallecido se dedicaba al tráfico de marihuana y que por su casa pasaba mucha gente al cabo del día.

Sus argumentos no convencieron al Ministerio Público, que mantuvo la alta petición de encierro para el joven. No tan alta como la que solicita para su hermano, de 18 años. Él será juzgado próximamente en la Audiencia Provincial de Zaragoza.

Lamine Gueye murió en su casa, atado con bridas y como consecuencia de dos fuertes golpes en la cabeza, en lo que la Policía investigó desde un principio como un probable ajuste de cuentas por droga. En la casa hallaron restos de marihuana.

Meses antes, el joven había sufrido otra agresión, también en su domicilio, en la que varios desconocidos se colaron en la vivienda y le propinaron una paliza y varios navajazos que le causaron heridas de poca entidad, fundamentalmente defensivas. Sin embargo, no se han encontrado pruebas de que ambos asaltos estén relacionados.

Menos de un mes después del crimen, la Policía arrestó a los dos hermanos, de origen colombiano, como presuntos autores materiales del crimen. También a otros dos hombres, de nacionalidades española y rumana, por encubrirles mientras duró la investigación policial.