La Fiscalía reclama sendas penas de dos años de prisión y 2.400 euros de multa para los dueños de Construcciones y Reformas Jesús, los hermanos J. J. y A. L. R., a los que imputa un delito de apropiación indebida por, presuntamente, quedarse un adelanto de 70.000 euros de Multiedificios para realizar una obra en Muel en la que, supuestamente, solo invirtieron 15.211. La empresa también solicita la condena de los imputados.
Los acusados, cuyas defensas pidieron la absolución, negaron en el juicio celebrado ayer en la Audiencia de Zaragoza que se hubieran quedado el dinero y aseguraron que ejecutaron los trabajos.
El arquitecto que supervisó la obra, F. A. A., respaldó la versión de los acusados y negó que nadie hubiera arrancado sanitarios o ventanas de las seis viviendas que debían terminar antes de que ellos salieran de la obra, que dejaron ejecutada en un 86%.
En la vista compareció como testigo Mariano Casanovas, el empresario condenado por fraude fiscal que dice liderar un grupo de industriales interesados en comprar el Real Zaragoza. Fue contratado para acabar la obra, pero no pudo, dijo, porque Multiedificios se quedó sin dinero para financiar los trabajos.
