La Fiscalía pidió ayer una condena de dos años de prisión para la dominicana I. M. F. F., que se sentó en el banquillo de la Sección Sexta de la Audiencia de Zaragoza acusada de un delito de favorecimiento de la inmigración ilegal.

La mujer, vecina de Ejea, firmó una carta de invitación para que un hermano suyo pudiera pasar un mes con ella. Sin embargo, el joven se marchó de su casa antes de concluir ese plazo y continúa en España.

"Yo no tenía conocimiento de que se iba a quedar aquí", dijo. Lo invitó, declaró, para que conociera a su sobrino recién nacido y para que cambiara de aires tras el asesinato del tercero de los hermanos.

El ministerio público pidió al tribunal que le aplicara el artículo 318.bis del Código Penal, concebido para reprimir a las mafias que trafican con mano de obra, aunque en la versión que permite atenuar la condena.

La defensa, ejercida por la letrada María Guiu, solicitó la absolución alegando que ese artículo exige "una afectación relevante a los derechos de los extranjeros" que en este caso no se dio.