La Fiscalía reclama a una empresa vinculada al Parque Tecnológico del Reciclaje (PTR) de Zaragoza una indemnización de seis millones de euros por su presunta implicación en el fraude ambiental conocido como operación Fragmento, una investigación desarrollada por el Seprona (Servicio de Protección de la Naturaleza) de la Guardia Civil que destapó la supuesta emisión a la atmósfera de enormes cantidades de gases de efecto invernadero (clorofluorocarbonos y hexaclorofluorocarbonos, CFC y HCFC) tras reciclar de forma supuestamente incorrecta más de 50.000 aparatos refrigeradores.
La petición figura en el escrito por el que el ministerio público solicita al magistrado del Juzgado de Instrucción número 5 de la capital aragonesa, Francisco Picazo, que decrete la apertura del juicio oral y siente en el banquillo a J. L. L. V. --responsable de la sociedad a la que el Seprona imputa las irregularidades-- y al empleado que gestiona directamente el área de reciclado de las neveras y aparatos de aire acondicionado. Les acusa de un delito ambiental y de otro de estafa, este último agravado por la elevada cuantía del presunto fraude, por los que se enfrentan a una petición de seis años de prisión.
En la causa ejercen la acusación dos SIGs --entidades empresariales que gestionan la ecotasa de los aparatos refrigeradores-- Ecodec y Ecosimelec, mientras que la DGA ha pedido su personación en las diligencias como perjudicada.
JUICIO El magistrado tiene sobre su mesa la petición de apertura del juicio oral junto con el recurso de las defensas de los acusados --el empresario, su empleado y la sociedad, como responsable civil subsidiaria de las hipotéticas multas e indemnizaciones que puedan recaer sobre los primeros en caso de condena-- contra la personación del Gobierno de Aragón.
Las acusaciones sostienen que la empresa vinculada al PTR cobró indebidamente elevadas cantidades de la ecotasa de las neveras y aparatos de aire acondicionado. El consumidor paga al adquirir cualquiera de ellos un recargo de veinte euros destinado a financiar el reciclaje del antiguo. Según el Seprona, la firma zaragozana dejaba escapar a la atmósfera los CFC y HCFC en lugar de confinarlos para ser procesados en Alemania.
El juicio por este asunto se celebrará, en principio este año, en la Audiencia de Zaragoza.
