Discursos cargados de sentimiento, flores blancas y los acordes de un violonchelo han servido este martes para rendir homenaje a las víctimas de la covid-19 pero también a quienes durante la pandemia han estado trabajando y demostrando su amor por Zaragoza y sus habitantes.

Y precisamente, por ser quienes han sufrido la mayor tasa de contagios y la muerte de compañeros, por estar "en la primera línea de batalla, exponiéndose al riesgo y dando lo mejor de sí mismos y sin reparar en nada más que en cumplir su misión", como han sido los sanitarios, es por lo que el alcalde, Jorge Azcón, ha anunciado que les concede la Medalla de Oro de la ciudad.

El de este martes ha sido un "triple homenaje" de Zaragoza para rendir homenaje a las víctimas y a sus familiares en la que ha sido "la mayor amenaza sanitaria de este siglo, con consecuencias devastadoras", ha reconocido Azcón para cerrar el acto.

Pero también, ha continuado, para reconocer el compromiso y responsabilidad de los empleados municipales y de las contratas que, ha recordado, han estado trabajando en los momentos más duros de la crisis y que son un "orgullo y ejemplo"; de las entidades vecinales y de la "gran oleada de solidaridad" de la sociedad civil, a todos los que les ha dado "gracias infinitas".

Azcón ha querido tener una "mención especial" con los profesionales sanitarios y aprovechar para anunciar la entrega de la máxima distinción de la ciudad, la Medalla de Oro, como una "justa recompensa" por su entrega profesional y humana.

El alcalde ha incidido asimismo en la necesidad de mantener una estrecha colaboración de todas las instituciones, incluida la UE, para afrontar un "triple desafío": acompañar a los más vulnerables, participar en los estímulos para recuperar la actividad económica y garantizar la prestación de servicios públicos que necesita la ciudadanía.

"Tenemos tesón y fortaleza. Lo hemos demostrado en los peores meses de la crisis sanitaria. Somos gente emprendedora y trabajadora. Tenemos talento y ganas de progresar. No nos asustan los retos ni los problemas", ha sentenciado Azcón.

La vicealcaldesa, Sara Fernández, encargada de abrir el acto, ha anunciado que Zaragoza trabaja en la creación de un espacio en la ciudad para que no se olviden las víctimas, los sacrificios ni lo que ha sucedido y para que sirva de aprendizaje en el futuro, al tiempo que ha subrayado la necesidad de "aprender de lo sucedido y no bajar la guardia y ser responsables desde nuestro ámbito de lucha contra este virus".

Sara Fernández ha destacado como la pandemia ha puesto de manifiesto el valor y ejemplo de los zaragozanos, con más de 4.000 voluntarios y 120 empresas inscritas en la plataforma de solidaridad ZGZAyuda y la recaudación de más de medio millón de euros.

Le ha seguido el jefe del Servicio de Prevención y Salud del Ayuntamiento, Javier Tricas, quien ha puesto de manifiesto la labor realizada por los trabajadores esenciales municipales y ha agradecido este homenaje que, no obstante, es "para quienes no están entre nosotros".

Desde los servicios sociales del Ayuntamiento, Juanma Arto, quien fue responsable del albergue provisional, ha aprovechado para destacar la colaboración de los usuarios de este recinto para poder convivir durante dos meses de confinamiento.

También ha intervenido Mar Martin, en representación de la Asociación de Víctimas COVID, quien ha recordado a los 696 fallecidos en Zaragoza, "retazos" de "un amigo, un hermano, una padre, una madre o un abuelo", ha dicho que este virus "no solo arrebata vida sino la forma de vivir" pero ha reconocido que "Hoy más que nunca a vivir toca".

Antes de la intervención del alcalde, representantes de los grupos municipales, de las instituciones aragonesas, de las víctimas, de sindicatos y patronales, de entidades vecinales y de distintos cuerpos profesionales han colocado los últimos claveles blancos con los que se ha concluido un tapiz floral dedicado a cada uno de los 696 fallecidos en Zaragoza que se colocará en el cementerio de Torrero.

En el camposanto también se colocará una placa de homenaje junto a una cápsula del tiempo en la que durante este acto se han introducido un folleto informativo contra la covid-19, prensa diaria, un lápiz de memoria con información municipal y una mascarilla con el lema municipal "vamos a ganar".

El cantante Nacho del Río ha sido encargado de clausurar este homenaje, celebrado en la plaza del Pilar frente a la fachada de la Casa Consistorial, con dos jotas compuestas por el poeta aragonés José Verón Gormaz.

El vicepresidente y consejero de Industria, Competitividad y Desarrollo Empresarial del Gobierno de Aragón, Arturo Aliaga, la consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales, María Victoria Broto, y la consejera de Sanidad, Sira Repollés, han asistido a este acto junto a los exalcaldes Luisa Fernanda Rudi y Juan Alberto Belloch y los principales representantes de todas las instituciones y diferentes estamentos de la región.