El Ministerio de Fomento aprobó ayer el proyecto de construcción de un nuevo tramo de la autovía A-68 que supone el desdoblamiento de la N-232 entre las localidades El Burgo de Ebro y Fuentes de Ebro. El presupuesto para estos trabajos es de 79.600.428 euros. El objeto del plan es la definición de las obras de duplicación de calzada de la N-232 entre estos dos municipios y sus variantes para su conversión en un nuevo tramo de la Autovía del Ebro (A-68).

Según Fomento, el corredor del valle del Ebro constituye «la vía natural» para el transporte por carretera desde el Mediterráneo hacia la cornisa Cantábrica, por lo que la conversión en autovía de la carretera N-232 constituye «una actuación indispensable para aumentar la capacidad y mejorar la seguridad vial en un itinerario con gran intensidad de tráfico de vehículos pesados».

El tramo objeto del proyecto se encuentra comprendido entre los puntos kilométricos 206 a 224 de la carretera N-232, con una longitud de 18,7 km de autovía que dará continuidad al tramo de A-68, ya existente en servicio entre Zaragoza (Z-40) y El Burgo de Ebro.

Se proyecta la remodelación de cinco enlaces existentes en la actual carretera N-232 y un total de 19 estructuras, entre las que se cuentan 13 pasos inferiores, un paso superior, un paso sobre el río Ginel y una losa sobre una acequia.

El plan también contempla la adaptación de un paso sobre la línea ferroviaria convencional Madrid-Barcelona y de dos pasos sobre el Canal Imperial de Aragón, según informó el ministerio. Adicionalmente, se prevé ejecutar cinco tramos de muro de contención. Las intersecciones a nivel deberán eliminarse, con la consiguiente reordenación de accesos, y en el proyecto se ha previsto dotar de un nuevo acceso a los polígonos de El Espartal I y El Espartal II, mediante sendos viales que conectan en el actual enlace de El Burgo Este.

El desdoblamiento de este tramo de la N-232 es una reivindicación histórica de los vecinos y residentes en estas localidades, dado que la vía acumula numerosos accidentes, muchos de ellos mortales, y es una de las carreteras más peligrosas de Aragón. Según los últimos datos, son un total de 24 los fallecidos desde el 2015 en la N-232.