El presidente del Instituto de Medicina Legal de Turquía, Keramettin Kurt, declaró la pasada semana que los forenses aconsejaron practicar las pruebas del ADN a las 62 víctimas españolas del accidente del YAK 42, registrado el 26 de mayo del 2003 en Trabzon, "pero España insistió en repatriar los cadáveres". Según manifestó el forense a El País, cuando los representantes españoles se hicieron cargo de los cadáveres, había 30 de ellos sin identificar. Kurt sostiene que su equipo de forenses contaba con el material necesario para realizar las pruebas de identificación mediante estas pruebas, pero "los españoles tomaron la decisión final". Asimismo, añadió que para realizar todas las pruebas que faltaban hubieran sido necesarios cuatro o cinco días. El forense rehusó realizar una valoración sobre la decisión española en este caso: "Empezamos a trabajar cuando se nos pidió. Nosotros recomendamos que se hiciera la prueba del ADN, pero España insistió en repatriar a los cadáveres. No hacemos interpretaciones", dijo. El responsable del Instituto de Medicina Forense señaló también que recogieron muestras del ADN de los 62 cadáveres y que se conservan a 80º bajo cero. Sin embargo, no le consta oficialmente si algunos familiares de las víctimas han solicitado que se realicen estas pruebas, aunque, si se pide oficialmente, pueden hacerse. Es una decisión que compete legalmente a la Fiscalía de Trabzon.