Francisco Bentué es hermano mayor de Honor de la cofradía de Jesús Atado a la Columna y Nuestra Señora de la Fratenidad y del mayor Dolor.

--¿Cómo se introdujo en el mundo cofrade?--Yo pertenezco a la cofradía del Atado, que tiene su sede en la parroquia de la Magdalena, la misma en la que me crié y en la que he vivido toda la vida. Además, mi hermano y mi padre ya pertenecían a ella. Así que me vino de casta.

--¿Qué le impresionaba de la Semana Santa de su niñez?--Muchas cosas. El paso de las cofradías de aquellos tiempos, porque entonces no existían los tambores y la sobriedad te encogía el corazón. Pero, también otras tradiciones que han perdido peso, como la visita a los monumentos del Jueves Santo, en el que las calles se llenaban de mujeres vestidas de manolas .

manolas

--Precisamente, usted fue el introductor del tambor en su cofradía.--La de las Siete Palabras fue la pionera en hacer esto en Zaragoza. En los Atados, en el año 66 sufrimos una gran crisis y nos quedamos sólo con 40 cofrades. En ese momento, los más jóvenes tomamos el mando a petición del resto. Yo asumí el puesto de hermano mayor y me propuse introducir los tambores para revitalizar la cofradía, porque teníamos que luchar con el atractivo de las recién creadas vacaciones de Semana Santa y el 600.

--También fueron de los primeros en convertirse en una hermandad mixta.--Por aquella época, le pedimos al entonces arzobispo, Pedro Cantero, que las mujeres pudieran vestirse de cofrades. Y él nos lo permitió. Eso también revitalizó la hermandad. Así, en mis 36 años como hermano mayor pasamos de 40 a 800 cofrades. Y ahora somos 1.300.

--¿Cuál es su momento favorito de la Semana Santa?--El final de las procesiones en San Cayetano. Y, particularmente, la salida de la iglesia de Santiago de los Atados el Jueves Santo, que tiene que ir a verla todo el mundo.

--¿Saldrá en procesión?--El Jueves Santo y Viernes Santo, si me quedan fuerzas.