Un fuerte incendio declarado en la noche del viernes en un bloque de apartamentos de Benasque puso a prueba el precario servicio de bomberos de la Ribagorza, que como otros parques de la provincia de Huesca, adolece de falta de personal suficiente para atender un vasto territorio en el que las segundas viviendas multiplican los potenciales focos de conflicto.

En esta ocasión, la cubierta de un bloque de once apartamentos quedó completamente destruida por un fuego que obligó a desalojar las tres viviendas que estaban ocupadas y por el que tres bomberos tuvieron que recibir asistencia por golpes, uno de los cuales aún seguía hospitalizado al cierre de esta edición.

Según fuentes de los Bomberos de la Ribagorza, el fuego se declaró en torno a las 22.30 horas en el edificio del número 18 del paseo de Eriste. Al parecer, las llamas procedían de una chimenea y, a partir de esta, se extendió a la cubierta del bloque de apartamentos.

A consecuencia del incendio fueron desalojados los tres apartamentos que estaban ocupados y tres bomberos que trabajaban en la extinción de las llamas necesitaron asistencia médica por golpes. Dos de ellos fueron trasladados al hospital de Barbastro, uno recibió el alta y el otro permanece en observación. Este último resultó lesionado tras desplomarse un muro del edificio.

Las mismas fuentes precisaron que el fuego afectó a los cinco apartamentos bajo la cubierta del edificio, donde permanece un retén para controlar los puntos de calor, y que los técnicos tendrán que determinar si la estructura ha sufrido daños.

Al lugar del siniestro se desplazaron bomberos de tres parques de la Ribagorza y del existente en Barbastro. El incendio se dio por controlado sobre las 10 de la mañana, pero todavía era necesario controlar el lugar del siniestro para evitar que se pudiera reavivar el fuego.

Fuentes de los bomberos de la zona insistieron en que la Ribagorza, como otras comarcas de Huesca, posee un servicio de extinción que trabaja en precarias condiciones debido a la falta de personal suficiente en los parques.

«Todo el mundo se pregunta qué hubiera ocurrido si, mientras los efectivos estaban en Benasque, se hubiera registrado otra incidencia en cualquier punto de la comarca o en el Sobrarbe, al que también hay que ir porque carece de servicio en la actualidad», señaló un miembro de los equipos antiincendios.

Se trata de un problema que recientemente ha llevado a la Diputación Provincial de Huesca a tomar cartas en el asunto y a comprometerse a gestionar un servicio que podría revestir la forma de un consorcio, pues las comarcas carecen de recursos y competencias para poder llevarlo a cabo.

A mediados de enero, en la vecina comarca de Sobrarbe, toda la plantilla de Boltaña protagonizó un plante. Estos bomberos, de carácter voluntario, entregaron su equipamiento y renunciaron a su puesto como forma de protesta por la tardanza de las autoridades en adaptar el servicio a la nueva normativa autonómica, que exige que un profesional dirija a los efectivos que no tienen este nivel laboral.