La fundación que se encargará de preservar y analizar la figura y dimensión social, política y cultural de José Antonio Labordeta empieza a andar la próxima semana. Cuando se cumplen cuatro años de su muerte, que supuso una conmoción social casi sin precedentes, todo está preparado para que la Fundación José Antonio Labordeta comience a trabajar para divulgar el inmenso legado de una de las personalidades más importantes del siglo XX en Aragón. La bienvenida se realizará en los próximos días con la celebración de un gran concierto en el que participarán artistas amigos de Labordeta.

Un local de 190 metros cuadrados en la calle Mariano Barbasán de Zaragoza, cedido por el Gobierno de Aragón, será la sede física de la entidad, y en ella habrá gran parte del material y la biblioteca del conocido cantautor aragonés. Hasta hace poco, esta permanecía en su domicilio particular tal y como la dejó antes de fallecer y a partir de ahora se expondrá de forma permanente junto a recuerdos y documentos relacionados con el autor.

COLABORACIÓN Desde el primer momento, la colaboración institucional ha sido absoluta, y ha sido decidido el apoyo impulsado desde la Consejería de Presidencia del Gobierno de Aragón, que dirige Roberto Bermúdez de Castro. De hecho, el Ejecutivo autonómico hace una aportación económica de 50.000 euros, al igual que el Ayuntamiento de Zaragoza y la DPZ. Con esta cantidad comenzará a trabajar una fundación que pretende financiarse con recursos propios, ya que aunque no tiene ánimo de lucro, sí pretende generar la suficiente actividad como para autofinanciarse, mediante la publicación de libros y documentos musicales y audiovisuales.

Además, la intención es realizar diversos congresos y trabajos académicos que permitan dar a conocer la obra y la trayectoria de Labordeta. Aunque la fundación tendrá su sede en Zaragoza, no se descarta que esta pudiera tener diversas delegaciones, ya que una de las ideas es que esta se extienda a lo largo de toda la comunidad autónoma.

Los objetivos son claros y así se recoge en la misma orden promulgada en abril que aprueba su constitución: "Recordar, estudiar, preservar y difundir la obra, el pensamiento y la memoria de José Antonio Labordeta, así como acoger la obra de todas aquellas personas vinculadas generacional o afectivamente con él".

Y "de acuerdo con los valores de libertad, igualdad y respeto a la libre convivencia y al pluralismo ideológico, defendidos por José Antonio Labordeta en su trayectoria vital, la Fundación pretende que estos valores presidan todas sus actividades y contribuir con ellas a la consolidación y desarrollo de la libertad y de la cultura". Otra de las intenciones es que sea una fundación muy integradora, con el mayor número de participantes.