El teniente de alcalde de Urbanismo de Zaragoza, Antonio Gaspar, urgió ayer al Gobierno de Aragón a remitir los informes preceptivos sobre la modificación del plan especial del híper de Utrillas, imprescindible para evitar el cierre. Gaspar advirtió al Ejecutivo regional de que cualquier retraso puede acarrear "graves pérdidas económicas a la ciudad".

Un auto del Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) obliga a ejecutar antes del 14 de febrero la sentencia que declaraba ilegal los 10.000 metros comerciales construidos bajo rasante. La Gerencia de Urbanismo acordó ayer recurrir la aplicación del fallo, aunque Gaspar dejó muy claro que la medida no pretende ni puede alargar el plazo. De hecho, la única posibilidad de evitarlo pasa por aprobar definitivamente la modificación del plan especial, trámite condicionado a los informes vinculantes de la DGA.

RESPONSABILIDAD El teniente de alcalde de Urbanismo mostró su confianza en que el Ejecutivo autónomo tenga la "responsabilidad suficiente" para evitar a la ciudad el pago de indemnizaciones por el cierre. No obstante, reconoció que la DGA dispone de medio año para emitir los informes desde la aprobación inicial de la modificación del plan especial, realizada en octubre.

Antonio Gaspar señaló que los servicios jurídicos municipales han recomendado recurrir la aplicación del fallo porque entienden que hay una "extralimitación a la hora de imponer un cierre" que tiene que llevar a cabo el consistorio y que quien lo ejecuta en primera instancia serían los promotores particulares.

El máximo responsable municipal en temas urbanísticos destacó que el equipo PSOE-CHA optó por legalizar la planta construida bajo rasante del híper de Utrillas para defender los intereses generales de la ciudad. También recordó que la decisión se tomó tras no poder llegar a un acuerdo amistoso con los comerciantes, que no aceptaron una oferta municipal "enormemente generosa".