Zaragoza La organización ecologista Greenpeace aseguró ayer que la Generalitat de Cataluña se ha comprometido a tomar muestras de agua, sedimentos y peces del Segre para comprobar si están contaminados por el vertido de DDT al Cinca, afluente del río catalán, cerca de su desembocadura. Un grupo de Greenpeace ocupó hace unos días las instalaciones de Montecinca, que se encontraba cerrada por vacaciones, y cerró el conducto de vertido de la planta al río Cinca para protestar por la presencia de restos de DDT en el agua, que se achacan a la actividad química de esta compañía. La Confederación Hidrográfica del Ebro también se comprometió a realizar un seguimiento. E. P.