Un juzgado de Madrid ha dictaminado que el ente Gestor de Infraestructuras Ferroviarias (GIF) no ejecutó correctamente la obra de la línea del AVE Madrid-Lérida a su paso por diferentes municipios provocando varios destrozos y peligros en fincas colindantes, por lo que le obliga a invertir 31 millones de euros en diferentes mejoras. Entre las localidades afectadas se encuentran las aragonesas de Pina de Ebro, Terrer, Salillas de Jalón y Ballobar.

La sentencia del Juzgado Contencioso Administrativo número 4 de Madrid se conoció ayer y el recurso fue presentado en el año 2001 por ocho ayuntamientos de Lérida, Huesca, Zaragoza y Guadalajara.

Los ayuntamientos argumentaron que la obra de la línea de alta velocidad entre Madrid y Lérida había dañado propiedades y destrozado caminos y accesos, por lo que exigían al ente que invirtiera para solventar este tema.

El fallo judicial sienta un precedente, ya que son numerosos los ayuntamientos descontentos con el GIF por destrozos varios y otros consistorios podrían llevar ante el juez al ente encargado de las obras del tren de alta velocidad. El GIF puede recurrir en los próximos quince días, si bien los alcaldes de los municipios esperan que no lo haga y acepte el fallo.