Mary Barra hizo historia hoy al asumir oficialmente la dirección de General Motors (GM) y convertirse en la primera mujer al frente de uno de los grandes fabricantes de automóviles del mundo.

A pesar del significado, tanto para GM como para el sector del automóvil, de la toma de posesión de Barra como consejera delegada, la compañía no ha planeado para hoy ningún acto especial.

General Motors anunció en diciembre de 2013 que Dan Akerson, presidente y consejero delegado de GM desde el 1 de septiembre de 2010, adelantaría su salida de la compañía tras saber que su esposa padecía un cáncer en avanzado estado de desarrollo.

Barra, de 52 años de edad y que ha pasado toda su vida profesional en General Motors, se limitó hoy a emitir un comunicado de dos párrafos sobre las perspectivas de la empresa crecimiento en 2014.

"Seguimos teniendo un buen rendimiento en los dos mercados más importantes del mundo, Estados Unidos y China", dijo Barra en su primera declaración como consejera delegada de GM.

"Nos estamos aprovechando de nuestra fortaleza en estos países para reestructurar y hacer las inversiones necesarias para crecer de forma rentable en otras partes del mundo", añadió.

La discreción con que General Motors ha planteado el primer día oficial de Barra al frente de la compañía es un reflejo de la personalidad de esta mujer, nacida en el seno de una modesta familia de trabajadores del sector del automóvil de Michigan, estado en el que históricamente se ha concentrado esta industria en EE.UU.

Su padre, Ray Makela, trabajó durante 39 años como operario en la planta de la marca Pontiac de General Motors.

Un ejemplo de la discreción de Barra es que en su cuenta de Twitter sólo hay cuatro mensajes, el último de hace 35 días para agradecer a Akerson su trabajo al frente de la compañía.

Otro ejemplo es que, cuando empezó a ascender en los puestos de alta dirección de General Motors y su nombre empezó a ser público hace dos años, fue erróneamente incluida en listas de mujeres latinas de mayor influencia en Estados Unidos, cuando en realidad el origen de su familia es el norte de Europa.

La discreción de Barra contrasta aún más con la atención que ahora recibe de los medios de comunicación.

El lunes, cuando Barra hizo acto de presencia en el Centro Cobo de Detroit, donde se celebra el Salón Internacional del Automóvil de Norteamérica (NAIAS), a la ceremonia de entrega de los premios al Coche y Camioneta del Año, estuvo acompañada por un séquito de más de un centenar de periodistas y fotógrafos.

Pero a pesar de la insistencia de los periodistas, Barra limitó sus declaraciones al mínimo y a frases cuidadosamente cautas.

El día anterior, durante la presentación de la camioneta GMC Canyon, Barra resumió, a preguntas de la prensa, su postura ante la creciente atención que recibe: "Simplemente vengo a trabajar cada día, trabajo lo más duro que puedo. Estamos concentrados en un objetivo. Y eso es lo que tengo delante", dijo.

"Es un honor tener este papel. Sólo quiero concentrarme en encabezar el equipo", añadió.

A pesar del planteamiento de Barra y General Motors, el sector del automóvil no ignora la transcendencia real de su llegada a la dirección del principal fabricante de automóviles de Estados Unidos y uno de los tres mayores del mundo.

"El 15 de enero de 2014 será recordado como un hito en la historia del sector mundial del automóvil", dijo hoy una de las expertas del automóvil más respetadas en Norteamérica, Michelle Krebs.

"Es muy significativo, porque si uno piensa en un sector que ha estado dominado históricamente por varones, ese sería el del automóvil", señaló por su parte David Cole, presidente del Centro de Investigación del Automóvil, una de las instituciones más respetadas de Michigan.

Además de la toma de posesión de Barra como consejera delegada, hoy también es el primer día como presidente de General Motors de Dan Ammann, hasta ahora vicepresidente y director financiero de la empresa.