El Gobierno de Aragón firmará con la Asociación Aragonesa para la Lucha contra las Enfermedades del Riñón (Alcer) un convenio por el que aportará 3,2 millones de euros hasta 2020 para sufragar los desplazamientos de personas en tratamiento de hemodiálisis en la comunidad.

El convenio al que hoy ha dado el visto bueno el Consejo de Gobierno establece que el transporte consistirá en el traslado de los pacientes desde su domicilio hasta el centro sanitario para recibir el tratamiento de hemodiálisis y la vuelta a su casa, pero no prevé el traslado para realizar pruebas o consultas médicas.

Al servicio, que tendrá carácter voluntario, podrán optar aquellos pacientes a los que se les haya prescrito este tipo de tratamiento y se lleve a cabo en un centro sanitario propio o concertado del Departamento de Sanidad o del Servicio Aragonés de Salud, y aquellas personas cuyo domicilio habitual esté en la comunidad y que estén en una situación clínica que permita el traslado en transporte ordinario.

El número de pacientes en tratamiento de hemodiálisis hospitalaria en Aragón ha oscilado en los últimos años entre 575 y 610, de los que un 25 por ciento deben desplazarse con medios de transporte sanitario.

El resto pueden utilizar otros medios de transporte ordinario, aunque su situación física desaconseja en la mayoría de los casos utilizar medios propios o medios de transporte colectivo.

La necesidad de desplazarse tres o cuatro veces a la semana y las alrededor de tres horas que los pacientes deben de permanecer en el centro sanitario aconsejan la gestión de estos desplazamientos mediante medios de transporte que puedan adecuarse a las necesidades de los pacientes y que, en la medida de lo posible, eviten los largos tiempos de espera y desplazamiento.

Según el Ejecutivo, la gestión de estos traslados a través de asociaciones de pacientes facilita la adaptación a las necesidades específicas de estos enfermos y la configuración de rutas que agrupen a dos o tres pacientes que comparten recorrido, con el consiguiente ahorro para la administración.

Alcer tiene como objetivo ayudar y orientar a los pacientes renales de la comunidad durante el proceso de esta enfermedad de crónica, aportando un tratamiento más integral a las repercusiones que tiene la enfermedad desde un punto de vista psico-social.