La ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, defendió ayer las obras del embalse de Yesa y su continuidad según lo previsto porque a su juicio ni las grietas aparecidas ni el desprendimiento del talud provisional comportan riesgos ni comprometen la estabilidad de la ladera. La ministra se pronunció así en la sesión de control al Gobierno en el Senado en respuesta a la parlamentaria de Amaiur, Amalur Mendizabal, quien le pidió "sensatez, responsabilidad y transparencia" en la gestión de esas obras.

La senadora recordó que el 24 de octubre, solo dos días después de que la CHE anunciase la resolución de los problemas y los deslizamientos en la ladera derecha, los colectivos ecologistas avisaron de la aparición de nuevas grietas. La ministra indicó que la situación no ha variado desde que finalizaron las obras de estabilización de la ladera en junio y añadió que los informes técnicos apuntan que el movimiento en la ladera es "imperceptible y está estabilizada".

Según indicó, esos informes apuntaron que podrían aparecer movimientos locales por efecto de las lluvias o por el proceso de vaciado desembalse. De hecho, en marzo ya se detectaron grietas superficiales "que no comprometían la seguridad de la ladera y que fueron reparadas para evitar filtraciones de agua". Se trata de un "proceso físico normal en este tipo de obras y tampoco comportan riesgos", dijo.