La comisión sobre el plan de depuración aragonés en las Cortes comenzó ayer a preparar lo que será el dictamen de los resultados de la investigación, y todo hace indicar que el resultado será más que descafeinado. No es que no fuera previsible en un órgano fiscalizador que pretendía consensuar posibles responsabilidades políticas en el modelo impulsado por el Gobierno PSOE-PAR, y mantenido por el PP-PAR; pero ayer se certificó la impresión al no aprobar los grupos «ni una coma» del borrador de dictamen que aportó la presidenta de la comisión, Marta de Santos, de Podemos.

Como el dictamen ha de alcanzarse por unanimidad, salvo milagros de concordia, la impresión entre los grupos es que la comisión se cerrará con un dictamen «de mínimos», que no ofenda a nadie, un pequeño listado de recomendaciones para el futuro y los votos particulares de los grupos que quieran hacerlos. La comisión busca estrictamente responsabilidades políticas, pero tanto en los citados votos particulares como fuera de las Cortes, los grupos harán lo que consideren. El secretario general de Podemos Aragón, Nacho Escartín, ya advertía en una reciente entrevista con este diario que no descartan llevarlo a los tribunales.

SIETE MESES

La comisión de investigación lleva siete meses funcionando, y por las Cortes han desfilado responsables políticos de poner en marcha el proyecto, tanto autonómicos como nacionales, los dirigentes de la Confederación Hidrográfica del Ebro, expertos en gestión hidrológica o colectivos opositores como la Red de Agua Pública de Aragón (RAPA) o la asociación de pueblos del Pirineo Adelpa.

Los impulsores defendieron el proyecto y la fórmula de concesión para la construcción de depuradoras, como mucho alguno admitió que el plan pudo estar «sobredimensionado», y terminó de arruinarse con la crisis económica.

Los críticos arrojaron sospechas sobre falta de contratos de licitación en algunos casos, o sobre desequilibrios en las ayudas según que partido gobernase en la localidad en cuestión, pero no se logró consenso. Y no parece que se vaya a alcanzar.