La Guardia Civil carece de la liquidez necesaria para hacer frente a las retribuciones del concepto de productividad. Un concepto en el que se incluyen horas extra, jornadas laborales en días festivos, nocturnidad, productividades específicas --que cobran las unidades de operativas de investigación-- y coyunturales -- por méritos especiales--.

Según explicaron fuentes de la Guardia Civil a este periódico, la Subdirección General de Personal de la Benemérita envió a los agentes del Cuerpo el pasado día 12 un mensaje de correo electrónico en el que se les advertía de la mala situación económica de la Benemérita. En el texto, al que tuvo acceso este diario, se indica que en el mes de noviembre "no se dispone de liquidez para abonas las retribuciones devengadas con cargo al concepto de productividad". Las fuentes consultadas afirmaron que las restricciones afectan a todos los guardias civiles salvo a los agentes de Tráfico, aunque mostraron sus dudas acerca de si los oficiales también se verán afectados.

La justificación que da la Subdirección General de Personal para justificar lo ocurrido es muy escueta. "Las necesidades del servicio han impuesto un mayor gasto en productividad de lo previsto para el año 2004, por lo que en junio, la Dirección General de la Guardia Civil efectuó la petición de incremento en la partida presupuestaria, para la que aún no se ha librado la cantidad necesaria". En el mensaje también se dice que el Ministerio del Interior está realizando las gestiones "necesarias" para "habilitar el dinero preciso" el mes que viene.

INDIGNACION DE LOS AGENTES La noticia provocó una "profunda indignación" en el seno de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), mayoritaria dentro del Cuerpo con unos 22.000 agentes adscritos. El delegado del colectivo en Aragón, Jesús Molins, solicitó que se lleve a cabo una auditoría que determine si lo sucedido es "consecuencia de una falta de previsión, de una mala gestión de los fondos o del desvío de dinero de la partida de productividad a otros cometidos".

Molins aseguró que no entiende cómo "desde la Dirección General de la Guardia Civil no se han tomado medidas internas para esclarecer este hecho". "Además, la Dirección General debería exigir responsabilidades", apuntó.

El delegado de la AUGC en Aragón también señaló que con el anterior máximo responsable de la Guardia Civil "se avanzaba con lentitud", pero que con el actual director general de la Benemérita, Carlos Gómez Arruche, "se va hacia atrás". "Ahora mismo no hay ningún diálogo con él", concluyó.