Un zaragozano, A. B. A., reconoció ayer en el Juzgado de lo Penal número 6 de Zaragoza que se hizo pasar por su hermano cuando, el 5 de marzo del año pasado, la Policía Local le paró en el camino de Las Torres para practicarle un control de alcoholemia.

El hombre circulaba sin carnet, al haber perdido todos los puntos sin hacer curso de recuperación, y además iba bebido (sin superar la tasa penal), por lo que dio los datos completos de su hermano, a cuyo nombre se tramitó la denuncia. No era la primera vez que lo hacía, pero le pillaron.

Por ello, y tras alcanzar su abogado, Javier Ferreira, un acuerdo de conformidad con la Fiscalía, el hombre aceptó una condena de 48 días de trabajos en beneficio de la comunidad por conducir bebido, y de 1 año y 9 meses de cárcel, que no cumplirá -pese a la reincidencia- a condición de pagar 1.080 euros de multa y no delinquir en dos años.