El Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas ha rechazado la solicitud del Ayuntamiento de Zaragoza de que el Gobierno central adelante el pago de la deuda que la DGA mantiene con el consistorio de la capital aragonesa, de unos 30 millones de euros, con cargo a la Participación en los Ingresos del Estado que le corresponden a la comunidad autónoma. Lamentando que exista ese debe tan considerable, desde Madrid se le informa que esta fórmula solo habría sido posible si Aragón se hubiera sumado al plan de financiación ofrecido por el ministerio a todas las autonomías, pero que finalmente no está entre las nueve que sí lo hicieron.

Hacienda insta al ayuntamiento zaragozano a llegar a un acuerdo con la DGA que se traduzca en un convenio en el que se autorice esa compensación de deudas, algo que desde el consistorio ven "bastante complicado de conseguir".

Así lo aseguró el vicealcalde y responsable de las finanzas municipales, Fernando Gimeno, en el transcurso del pleno extraordinario celebrado ayer por el polémico informe de fiscalización del presupuesto 2011 por parte de la Cámara de Cuentas de Aragón. El socialista destacó que "vamos a seguir intentando llegar a acuerdos" al tiempo que advirtió de que "tendremos medios" para cobrar. Con el diálogo o a través de los tribunales y la vía del embargo.

HACE MÁS DE UN AÑO Porque "hay ya un acuerdo de compensación de deudas redactado desde hace más de un año y solo falta que se firme". Algo que él mismo achacó a los "tensiones de liquidez y presupuestarias", que han llevado a la DGA a "discutir con el ministerio un plan de ajuste" y las consiguientes dificultades "de gestión presupuestaria".

Aunque la vía judicial sigue muy presente, especialmente en lo relativo al convenio por el tranvía y los 9,5 millones de euros que todavía adeuda el Ejecutivo aragonés correspondientes al 2013. "Si siguen sin pagarlo durante mucho tiempo terminaré yendo a los tribunales", para que al menos sea un juez quien reconozca esa deuda y, a partir de ahí, incluirlo en esas "medidas que no nos quedará otro remedio que tomar", como avisó el vicelacalde también.

Entre ellas la del embargo, que ya usó una vez, y a la que podría recurrir ya para exigir el pago de los impagos correspondientes a tributos que recauda el consistorio y que la comunidad autónoma no ha atendido. "Para lo demás necesito la sentencia de un tribunal", señaló. Y ni siquiera puede apelar a la reforma local que "dice que se pueden compensar deudas pero no explica cómo".

Mientras, Gimeno destacó el tono "amable y cariñoso" con el que atiende la petición de Zaragoza. "Me hago cargo de la importante deuda que mantiene la comunidad autónoma con la corporación, generando graves problemas de tesorería y liquidez", señala en su escrito el ministerio.