Las obras que se llevan a cabo para la construcción de un bloque de viviendas de protección oficial en Albarracín han tenido que ser detenidas por la aparición de unas tumbas del que fuera cementerio islámico durante la época de este reino de taifas musulmán. El arqueólogo y concejal de Albarracín, Octavio Collado, informó que en la zona del barrio del Arrabal ya habían aparecido anteriormente tumbas musulmanas.

En los años 50 apareció una primera tumba cuando se hicieron obras para instalar el abastecimiento de agua y los desagües, después en los años 80 cuando se arreglaron unas casas y más recientemente durante la construcción de un hotel.

HALLAZGO EN LOS 80 Esa zona de Albarracín, explicó Collado, es la partida Alcabones que ya indica su uso musulmán. Recordó que en los primeros años 80, en el Arrabal se había localizado también un cipo (lápida musulmana) con inscripciones en árabe. Este arqueólogo expresó a Efe su queja por la falta de atención tanto del ayuntamiento como de la DGA, que no habían previsto un control arqueológico previo de la zona antes de la construcción de las viviendas promovidas por el Gobierno aragonés.

Finalmente, explicó, se hicieron unas catas que permitieron el hallazgo de varios restos y ahora se está llevando a cabo la excavación arqueológica.

Las tumbas aparecen enterradas aproximadamente a 1,30 metros de profundidad en la tierra y el cementerio, en opinión de Collado, pudo ser muy extenso ya que entre las distintas referencias de que dispone podría tener 4 o incluso 5 hectáreas.