El Instituto de Ciencia de Materiales de Aragón ha hallado una molécula idónea para crear paneles fotovoltaicos sin necesidad de usar metales, lo que supone la tercera generación de estos dispositivos, que se define por la ausencia de silicio y que usan moléculas orgánicas sintetizadas en el laboratorio.

El avance aportado por los investigadores de este centro mixto, compuesto entre el Consejo Superior de Investigaciones Científias (CSIC) y la Universidad de Zaragoza, supone mejorar el control de las propiedades de los dispositivos y la reducción de costes en su construcción. Son paneles muy adecuados para ventanas de edificios pasivos, ordenadores o dispositivos móviles, puesto que ofrecen una alta eficiencia en interiores o ante la baja luminosidad.

Los investigadores Santiago Franco y Lucía Gallego se han encargado de la síntesis de la molécula.