Aragón se ha convertido en la primera comunidad en realizar terapia transfusional extrahospitalaria al incorporar a los helicópteros del servicio de emergencias 112 los medios necesarios para conservar y suministrar sangre a bordo.

Estos vehículos dispondrán, en todos los servicios realizados, de dos unidades de concentrados de hematíes de grupo 0-, que podrán ser transfundidos al paciente en el lugar del incidente, sin necesidad de llegar al destino, según ha informado este jueves el Gobierno de Aragón.

Las consejeras de Presidencia, Mayte Pérez, y de Sanidad, Pilar Ventura, han presentado hoy este proyecto, que se puso en marcha el pasado 20 de diciembre y que permite llegar con una mayor calidad a los incidentes con patología traumática.

De esta manera, las unidades de sangre universal se suman al equipamiento ya disponible (ecógrafos portátiles, apósitos hemostáticos o torniquetes), para la atención a los pacientes con sospecha de hemorragia masiva, principal causa de muerte potencialmente prevenible (representa el 40 % de mortalidad en pacientes con trauma en todo el mundo).

La iniciativa se ha hecho realidad gracias al trabajo conjunto y coordinado durante el último año y medio de todas las partes implicadas.

El Departamento de Presidencia, como responsable del contrato del servicio del helicóptero, ha coordinado la parte técnica llevada a cabo por el personal sanitario del helicóptero contratado a través de la empresa Eliance, los especialistas y responsables del Banco de Sangre y Tejidos de Aragón, el Servicio de Hematología del Hospital Obispo Polanco y el 061.

En el acto, Pérez ha destacado la importancia de mejorar "la prestación de un servicio vital, que puede salvar vidas" y que Aragón sea una comunidad "pionera" en que los dos helicópteros del 112 lleven en cada desplazamiento las bolsas de sangre gracias a la "intensa cooperación entre departamentos del Gobierno de Aragón", en este caso con el de Sanidad.

Por su parte, Ventura ha recordado que Aragón es un territorio muy extenso y de ahí la necesidad de estar lo más preparado posible de cara a las emergencias.

En los casos de hemorragias masivas en accidentes, ha dicho la consejera de Sanidad, "está evidenciado científicamente que la transfusión a tiempo puede evitar la muerte".

La adjudicataria del servicio ha sido la encargada de dotar el helicóptero de los recursos materiales necesarios de conservación y transporte de estas unidades de sangre universal, mientras que el Banco de Sangre y Tejidos ha llevado a cabo el procedimiento que garantiza la viabilidad del transporte y conservación de las bolsas de sangre.

El proceso de cesión, almacenamiento y transporte de la sangre es controlado por el Banco de Sangre y Tejidos de Aragón de manera automatizada, lo que permite gestionar la trazabilidad en tiempo real.

Las dos unidades de concentrados de hematíes estarán depositadas en todo momento en la frigohemoteca de las bases (en Zaragoza y Teruel) a una temperatura entre 2 y 6 grados en la conservación y de entre 1 y 10 durante el transporte.

Tras la valoración "in situ" del paciente y sospecha de hemorragia se utilizará un calentador externo de fluidos para la administración de concentrados de hematíes con el sistema específico para infusión.

La reposición de las unidades suministradas o próximas a su caducidad (nueve días antes) se realiza siempre en coordinación con el Banco de Sangre y Tejidos de Aragón, que garantiza la existencia permanente de concentrados de hematíes en las bases correspondientes.

El 112 SOS Aragón dispone de dos helicópteros sanitarios, ubicados en la Base Aérea de Zaragoza y en el Aeropuerto Caudé de Teruel, y constituye uno de los principales componentes del sistema de atención sanitaria extrahospitalaria de la Comunidad, junto a los medios terrestres del 061 y los helicópteros de rescate de la Guardia Civil.

El año pasado, los helicópteros del 112 realizaron 501 vuelos, que supusieron 605 horas con 40 minutos de vuelo. Esto implica un aumento del 23 % respecto a lo registrado en 2018, cuando se hicieron 407.

Del total, 306 salidas se llevaron a cabo desde la Base de Zaragoza y el resto, 195, desde el Aeropuerto de Teruel.

Por tipo de salidas, 59 se debieron a accidentes de tráfico, 24 a siniestros laborales y 201 a otras causas sanitarias, entre las que se incluyen los ictus y los infartos. Mientras, 128 desplazamientos tuvieron como causa traslados hospitalarios y 6, traslados intrahospitalarios de carácter preventivo.