Un joven de 31 años figura entre los tres nuevos fallecidos como consecuencia de la gripe A en Aragón, lo que eleva a diez el número total de muertes por esta causa en la comunidad autónoma. Los tres últimos casos se dieron en Zaragoza durante el pasado fin de semana y todos ellos sufrían patologías previas.

El hombre de 31 años se convierte en el paciente más joven hasta la fecha en morir como consecuencia de una gripe estacional del virus A H1N1. Según fuentes consultadas por este diario, el enfermo sufría una grave enfermedad y padecer la gripe agravó su estado hasta perecer en el hospital Clínico de la capital aragonesa.

Las otras dos muertes se produjeron en la clínica Montpellier, donde falleció un paciente de 79 años que también padecía patologías previas, y en el hospital Royo Villanova, donde lo hizo un paciente de 72 años.

CAMPAÑA DE VACUNACIÓN

Mientras, el Salud ha incrementado durante el mes de enero la campaña de vacunación, y llegó a poner 5.000 dosis en tan solo un mes. De hecho, las mayores complicaciones de la gripe A se han cebado con las personas que no habían sido vacunadas. El Salud también descarta que dos fallecimientos que habían sembrado alguna duda en las últimas semanas, hayan sido consecuencia de esta patología.

En este sentido, sigue sin haber novedad en las investigaciones sobre el fallecimiento de un hombre de 49 años como consecuencia de la gripe A en Teruel. El hombre, que no presentaba patologías previas, falleció en el hospital Obispo Polanco hace escasas semanas apenas unas horas después de que desde la consejería hubiera asegurado que no había ningún paciente ingresado por el virus que no sufriera enfermedades anteriores.

En todo caso, el Departamento de Sanidad insistió ayer en realizar un nuevo llamamiento "a la calma" a todos los ciudadanos. "Queremos seguir transmitiendo ese mensaje de tranquilidad, incidiendo en que la gripe estacional es una infección vírica aguda causada por un virus gripal y que en este momento predomina el tipo A", indicaron fuentes del Departamento de Sanidad, que también incidieron en recordar que "las hospitalizaciones e ingresos en unidades de cuidados intensivos se producen todos los años, así como fallecimientos, sobre todo agravados por otras patologías".

En todo caso, los diez fallecidos suponen acercarse a los trece acaecidos durante la epidemia del 2009 en Aragón. De hecho, esta es la cantidad de muertes prevista por los profesionales sanitarios, todavía muy lejos de los 45 del 2005. Asimismo, los expertos consideran que el punto alto está remitiendo.