Un hombre de 51 años fue detenido el pasado 1 de agosto en Zaragoza cuando abusaba de una menor en un pasaje que comunica las calles Don Pedro de Luna y Delicias. El sospechoso, F. S. P., fue sorprendido por agentes de la Policía Nacional cuando abrazaba a su víctima y le besaba en el cuello y la cara pese a su resistencia.

Al verse descubierto, el presunto agresor se lanzó contra los policías. A uno de ellos le dio una patada en una pierna y un golpe en la mano que le fracturó un hueso, por lo que tuvo que ser trasladado a un hospital. Fue arrestado como supuesto autor de tres delitos: abuso sexual, lesiones y atentado.

Los hechos sucedieron sobre 18.30 horas. Varias dotaciones policiales fueron enviadas por el 091 tras ser alertado por un ciudadano.

Segundos después, un agente de paisano halló en el pasaje al presunto agresor y a su víctima y observó cómo el primero abrazaba a la menor de edad y la besaba en el rostro y cuello.

La chica realizaba ademanes con sus manos para intentar apartar al individuo. El agente se identificó como policía, a la vez que separó a ambos, mientras la joven le manifestaba espontáneamente que el sospechoso la había abordado sin conocerla de nada.

Además, la menor denunció que el hombre la había agarrado y comenzado a besarla, realizándole tocamientos por su cuerpo.

Al ver que iba a ser detenido, F. S. P. intentó huir del lugar, según la Policía, y tuvo que ser sujetado y reducido. Se produjo un forcejeo en cuyo transcurso resultó herido un policía.

La joven fue trasladada a un centro médico para ser asistida y posteriormente fue acompañada a dependencias policiales, con el fin de formular, en compañía de su madre, la denuncia.

Medios policiales resaltaron ayer la rapidez con que se actuó en este caso, que fue fundamental para su rápida resolución, y agradecieron la colaboración ciudadana, imprescindible para obtener la máxima eficacia.