El Ayuntamiento de Zaragoza rendirá homenaje, el próximo 1 de abril, al capellán Gumersindo de Estella, que durante la guerra civil y en años posteriores asistió espiritualmente a los condenados a muerte que eran fusilados en las tapias del cementerio de Torrero. El acto en memoria del sacerdote, un fraile capuchino que recogió su experiencia en unos diarios con gran valor testimonial, tendrá lugar a las 19.30 horas en el teatro Principal.

El homenaje fue presentado ayer en el Ayuntamiento de Zaragoza, en un acto en el que intervinieron el alcalde, Alberto Belloch; el historiador Julián Casanova y el concejal de Cementerios, Laureano Garín. Belloch explicó que el acto en memoria del capuchino, que murió en 1974 con 94 años, coincide con dos efemérides: los 75 años del fin de la guerra civil y los 40 años del fallecimiento de Gumersindo de Estella.